21 Abr Los océanos y el cambio climático: la última frontera
El Plan de acción de la ONU frente al cambio climático alerta sobre la larga historia de impacto humano en los océanos. En una de las últimas sesiones informativas de la ONU, el secretario general António Guterres advirtió que “la era del calentamiento global había terminado, ahora es la era de la ebullición global”. Esta afirmación marca un punto de inflexión en la comprensión del cambio climático en los mares y océanos, enfatizando la urgencia de buscar soluciones inmediatas para contrarrestar los estragos que sufren los ecosistemas marinos.
El cambio climático no es sólo el incremento de la temperatura, sino el aumento del nivel del mar, la acidificación (aumento de CO2 en el océano) y la disminución de oxígeno. Cambios que impactan directamente en los ecosistemas marinos afectando a todas las especies y provocando una alteración en cascada que afecta a las comunidades humanas que dependen de estos.
Para la comunidad científica es crucial aumentar el entendimiento y estudio de las consecuencias del cambio climático y buscar procesos para su mitigación. En este sentido, los programas nacionales de Ciencias Marinas como ThinkinAzul son iniciativas fundamentales para crear soluciones que ayuden a paliar el cambio climático en sectores de la economía azul como la acuicultura.
Cambio climático y océanos
De acuerdo con el último informe del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) los humanos somos la principal causa, desde la década de los 70, del aumento del calor oceánico y de las olas de calor debido al exceso de gases de efecto invernadero que producimos.
En esta batalla, los océanos están jugando un papel decisivo gracias a su función como principales sumideros de carbono del planeta, captando el exceso de calor y energía atrapado en la atmósfera.
Pero las consecuencias son innumerables y palpables; este aumento de la temperatura año tras año, verano tras verano, está conllevando una tropicalización de nuestras aguas que se convierten en hábitats ideales para especies invasoras mientras provoca la muerte y desplazamiento de muchas especies autóctonas. En este nuevo contexto, el continuo diálogo mar-océano se está recrudeciendo con grandes tormentas y eventos catastróficos como la borrasca Gloria que dejó a su paso, playas destrozadas, inundaciones, y personas desaparecidas.
Su papel de sumidero de carbono, a priori una perfecta solución a la acumulación de CO2 atmosférico, rompe el equilibrio químico en el agua aumentando la acidez de los océanos. Este desequilibrio provoca que animales que dependen estrechamente de este carbonato, como los corales, los moluscos o crustáceos vean afectado su crecimiento, desarrollo y supervivencia con consecuencias negativas para toda la biodiversidad marina.
Mitigación del cambio climático, la solución colectiva.
En un mundo cada vez más consciente de los desafíos del cambio climático, la acción colectiva se convierte en un pilar fundamental para un futuro sostenible. Desde comunidades locales hasta organizaciones internacionales, todos debemos desempeñar un papel en la mitigación de los efectos devastadores del cambio climático. Las soluciones pueden ser a pequeña escala, como optar por formas más sostenibles de transporte (bicicleta, autobuses, etc.) hasta políticas que apoyen la preservación y restauración de los ecosistemas que contribuyen a la reducción de emisiones de gases, y favorecen la biodiversidad y resiliencia de los ecosistemas frente al cambio climático.
La economía azul puede desempeñar un papel crucial en la mitigación de los efectos del cambio climático en los ecosistemas marinos. La Comunidad Valenciana, a través del proyecto ThinkInAzul, está comprometida con conseguir una acuicultura sostenible y resiliente que promueva la conservación y reducción del impacto humano del medio marino a través de la mejora de la monitorización y supervisión de datos ambientales, la valorización de los descartes de pesca como ingrediente para piensos o el diseño de nuevos productos más sostenibles con envasados biodegradables. (Ver las líneas de investigación del proyecto: Observación y monitorización, Acuicultura sostenible, Economía azul).
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